El Hospital Universitario de Badajoz ha incorporado un nuevo PEC-TAC que propiciará una mayor eficiencia en cuanto al diagnóstico y al tratamiento del cáncer para los pacientes de la comunidad autónoma.

Este sistema permitirá duplicar a su vez el número de pacientes tratados anualmente en este ámbito, ha explicado a los medios el jefe del Servicio de Medicina Nuclear del hospital Universitario de Badajoz, Ignacio Rayo, durante una visita a las instalaciones realizada por el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara.

Como ha expresado Ignacio Rayo, la nueva instalación, con una inversión de 2,7 millones de euros, es “tecnológicamente muy importante”, pues este PEC-TAC “es el doble de rápido que el anterior, su resolución permite detectar lesiones de cuatro o cinco milímetros (el anterior alcanzaba los nueve milímetros) y el software es más avanzado”.

En este último caso, el software incluye incluso un sistema para planificar desde el PEC-TAC el tratamiento de los pacientes de radioterapia, lo que permitirá determinar qué zonas del tumor tienen más actividad, con lo cual los profesionales podrán ajustar la dosis de radiación destinada a esas zonas.

A su vez, y gracias a la visión de las lesiones de menor tamaño, se podrán cambiar los campos donde se ejerce la radioterapia o mejorar el trabajo de la propia cirugía.

En este caso se ha adquirido a su vez una gammacámara que se instalará en los quirófanos para guiar de forma más eficiente a los cirujanos respecto a las lesiones localizadas. El software incluido también propiciará evaluar las lesiones más importantes donde se detecta una progresión o bien una reducción tumoral.

Esta adquisición incorpora a su vez un programa de formación para los profesionales sanitarios, tanto para los especialistas como para los residentes de Medicina Nuclear.

Rayo ha destacado que el nuevo equipamiento se haya instalado “en un tiempo récord, en cinco semanas y con todos los procesos de calidad y validaciones”, proceso de instalación que ha implicado “a diversos servicios”.

Aunque se haya tratado de un corto periodo de instalación “era necesario mantener la atención a los usuarios”, lo que se ha logrado gracias a una máquina procedente de Castilla La Mancha, que ha permitido atender a 17 pacientes diarios, y a derivaciones a otras regiones, todo ello con el objetivo de que no se retrasasen los diagnósticos.