La cosecha de la campaña vitícola 2021/2022, que ha comenzado en agosto, será de media un 15 % menos que la anterior -un 20 % menos en Extremadura- y oscilará entre los 39 y 40 millones de hectolitros, ha señalado este jueves la organización agraria Asaja.

La sectorial vitivinícola de Asaja ha realizado una primera estimación de la cosecha, todavía condicionada por la climatología de las próximas semanas.

La cosecha será un 10 % inferior a la media de las últimas tres campañas, ha indicado en una nota la organización, que ha explicado que la bajada de producción se producirá en las zonas con mayor superficie de viñedo.

En concreto, la merma será del 15 % respecto a la campaña precedente en Castilla-La Mancha y del 20 % en Extremadura, debido sobre todo a los efectos causados por la borrasca Filomena en enero pasado y las posteriores heladas de primavera y los daños por pedrisco.

Asaja ha destacado la “relativa mejoría” del mercado del vino, tras la “pésima situación derivada de la pandemia” que afectó a la primera mitad de la campaña anterior.

La ha atribuido a la reducción de producción de Francia e Italia por los daños que causaron las heladas en primavera, al incremento del consumo con la apertura de la hostelería y al aumento de las exportaciones, impulsado en cierta medida por la suspensión de los aranceles de Estados Unidos.

Según la sectorial, la retirada de vino de bodegas y cooperativas se está realizando “a buen ritmo”, a precios bajos pactados a principio de campaña.

La organización ha calculado que los stocks de vino y mosto a final de campaña serán ligeramente superiores al cierre de la campaña pasada, cuando se situaron en los 36,6 millones de hectolitros.

Ha exigido que los precios de la uva para la próxima vendimia sean “acordes a la baja producción estimada y a la reactivación que está experimentando el mercado”, y que sean siempre superiores a los costes de producción, como establece la ley de la cadena alimentaria.