De esta forma, la Junta de Extremadura tiene la intención de mejorar el funcionamiento de las instalaciones durante las campañas de riego, evitando las pérdidas de agua, entre otras consecuencias, haciendo un uso más eficiente de esta.

Desde la Consejería de Agricultura se han invertido más de 7,6 millones de euros en obras directas de mejora y modernización, ayudas a las comunidades de regantes destinadas a la eficiencia energética y al mantenimiento.

La repercusión que dejan las acciones realizadas es lo más importante, apunta Begoña García: «En 2015 existían 319 hectáreas de árboles permanentes (frutales, almendros y olivos), ahora, en 2022, como consecuencia de la modernización de la Comunidad de Regantes de Valdecañas, las hectáreas destinadas a los cultivos permanentes son 1.744. Y, además, las previsiones son que el año que viene, la superficie aumente hasta las 1.918 hectáreas»

El secretario general de Población y Territorio, Manuel Mejías, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, Antonio Yáñez y el presidente de la Comunidad de Regantes de Valdecañas, Primitivo González, han asistido a la rueda de prensa.