El proyecto de "Sondeos arqueológicos para localización de fosas de la Guerra Civil y la represión en el cementerio de Navalmoral de la Mata (Cáceres)", efectuado en los meses de agosto y septiembre del presente año, supone la continuación de los trabajos realizados en campañas anteriores, gracias a las cuales se localizaron varios enterramientos clandestinos con víctimas de la represión franquista, según han informado desde este colectivo en una nota de prensa.

Esta nueva campaña ha permitido confirmar la hipótesis de la que se partía, sobre la base de los hallazgos realizados en las intervenciones previas: que las víctimas fueron enterradas junto a la tapia oriental del recinto antiguo del cementerio, sin descartar otros posibles emplazamientos, añaden en un comunicado.

En total, han sido ejecutados cinco sondeos con metodología arqueológica, desde el perímetro de la zona que arrojó resultados positivos en las actuaciones previas de 2019 y 2020, financiadas por la Dirección General de la Memoria Histórica del Ministerio de Justicia y por el Proyecto para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura (PREMHEX), respectivamente. Los cinco sondeos efectuados, de dimensiones considerables, han permitido concluir la investigación de prácticamente todo el espacio disponible del pasillo oriental del cementerio, exceptuando la zona más cercana a la puerta y aquellas que actualmente se encuentran ocupadas por sepulturas y panteones familiares, algunos de los cuales se constata que fueron construidos por encima de las fosas de la represión.

En una de las catas, situada a continuación de las fosas ya exhumadas en 2020, ha sido hallado un cuerpo enterrado en una posición y con unas características que lo hacen compatible con otra posible víctima de la violencia desatada a consecuencia de la Guerra Civil en la localidad. Se trata de un enterramiento en fosa simple que alberga, hasta donde se ha podido documentar, un solo individuo adulto en conexión anatómica y posición decúbito lateral derecho o prono (es decir, boca abajo), con ausencia de ataúd, y a cota similar que las fosas exhumadas en intervenciones precedentes, más alta que la mayoría de enterramientos regulares.

El cuerpo de este individuo no ha sido exhumado, al exceder los objetivos del presente proyecto, sino que sólo se ha procedido a excavar los restos muy someramente –en aras de su mejor conservación—, lo imprescindible para determinar que la postura no se corresponde con los cánones de enterramiento habituales en los cementerios cristianos. Además, la disposición de parte del cuerpo por debajo de un panteón construido en el año 2006, unido a la previsión de lluvias que ponían en peligro la estabilidad del terreno, hacían desaconsejable su extracción en este momento.

En el futuro se plantearán las medidas técnicas necesarias que posibiliten su exhumación, al tiempo que aseguren la sustentabilidad del panteón, añaden los responsables de estos trabajos.

De forma paralela a los trabajos de campo, se ha realizado el análisis y estudio de la documentación custodiada en el Archivo Municipal entre los años 1936 y 1939, así como la recogida de testimonios orales y de datos ante mortem entre las familias de las víctimas, todo ello como parte del trabajo de investigación documental que se efectúa de manera complementaria a las labores arqueológico-antropológicas, y que sirve de apoyo a las mismas. Esta nueva revisión ha permitido concretar las circunstancias en las que se produjeron las muertes de algunas de estas personas, así como conocer las identidades de otras víctimas que, hasta el momento, permanecían en la sombra.

Así, se ha podido completar el listado de personas represaliadas por el franquismo en la localidad hasta alcanzar el centenar de nombres, víctimas de la represión tanto extrajudicial (los llamados “paseos”), como ejecutadas en cumplimiento de las sentencias emitidas por tribunales militares por medio de la celebración de Consejos de Guerra, generalizados a partir de febrero de 1937.

A ellas habría que sumar la amplia lista de personas, más de trescientas, que sufrieron otros tipos de condena (6, 12 o 30 años de prisión), o que debieron soportar represión económica y/o social debido a la emisión de los denominados Expedientes de Depuración de Responsabilidades Políticas, por medio de los cuales se practicaba la exclusión social de la persona considerada como “no afecta” al régimen, o incluso se justificaba su asesinato, añaden los responsables de esta iniciativa.

Los resultados del estudio serán entregados junto con la memoria final del proyecto, a los organismos intervinientes, para conocimiento de las familias y con el fin de que los datos resultantes puedan pasar a engrosar la información que se tiene hasta el momento sobre la represión en Navalmoral de la Mata y, de forma más general, en la provincia de Cáceres.

El proyecto ha sido promovido por el Ayuntamiento de Navalmoral de la Mata y la asociación Selek (Asociación Científica para el Estudio de los Conflictos Bélicos y Procesos Represivos), y está financiado por la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes de la Junta de Extremadura.