Abierta al tráfico la carretera EX-373 tras las obras de acondicionamiento que mejoran la seguridad vial
La carretera EX-373 se encuentra abierta al tráfico tras las obras de acondicionamiento y mejora de las que se benefician ya más de siete mil vecinos de la comarca del Tajo-Salor, especialmente, de los municipios de Garrovillas de Alconétar, Navas del Madroño y Brozas.
Esta actuación, que ha contado con una inversión de 2.574.586 euros, sirve para facilitar la movilidad en la comarca del Tajo-Salor, conectar a la ciudadanía y aumentar sus posibilidades de comunicación, desarrollo y acceso a los servicios, reforzar la seguridad vial, propiciar un tráfico más fluido, dinamizar y cohesionar el territorio de Extremadura y, por tanto, contribuye a mejorar la calidad de vida en el ámbito rural y a la lucha contra la despoblación.
La obra ha consistido en el acondicionamiento y ensanche de la carretera, que ya cuenta con arcén, y en la corrección de tramos difíciles, de poca visibilidad, cambios de rasante y pendiente, a través de una actuación sobre el alzado que mejora la conexión entre Garrovillas de Alconétar y la comarca del Tajo-Salor con la A-66.
La ejecución de la obra ha consistido en la construcción de calzada con una adecuación del trazado, tanto en planta como en alzado, a la normativa vigente y una modificación del actual estado, que combina rectas prolongadas y alzado con numerosos cambios de rasante, para conseguir una circulación más segura.
La actuación ha tenido lugar entre el punto kilómetro 0 (intersección con la N-630) y el 4.5 (sin afectar el enlace con la A-66), dentro del término municipal de Garrovillas de Alconétar. En el tramo objeto del contrato, la carretera presentaba una plataforma con un ancho aproximado de cinco metros, sin arcenes ni bermas, un trazado en planta que combinaba las rectas prolongadas con las curvas cerradas y un alzado con numerosos cambios de rasante que provocaban pérdidas de visibilidad.
Además, se ha realizado un ensanche generalizado de la carretera EX-373 con una calzada de seis metros y arcenes de un metro, un acondicionamiento del trazado con el fin de conseguir una vía adecuada a la velocidad del proyecto y, en particular, una mejora del trazado en planta en el tramo comprendido entre los puntos kilométricos 0 al 1,3, que coincidían con las zonas de menor visibilidad de la carretera. También se ha procedido a la reposición del camino existente al oeste de la N-630.