La Guardia Civil ha instruido diligencias judiciales a un vecino del municipio pacense de Bodonal de la Sierra acusado de cometer un supuesto delito contra la flora y fauna.

A finales del pasado mes de febrero, el SEPRONA de la Guardia Civil de Fuente de Cantos cuando realizaba servicio para prevenir la caza furtiva, localizó una trampa jaula en el paraje conocido por “El Campillo”, dentro del término municipal de Cabeza la Vaca.

La trampa  estaba instalada con un gallo en su interior a modo de cebo, que supuestamente tendría como objetivo atraer y capturar animales silvestres.

Con las gestiones practicadas durante el transcurso de la investigación y  vigilancias en torno a la zona de localización, los agentes pudieron averiguar la identidad del responsable de su instalación, un vecino de Bodonal quien se encargaba de manipularla y mantenerla en uso.

El hecho de cazar o capturar especies silvestres sin estar legalmente autorizado con este tipo de procedimiento de carácter no selectivo para los animales, es constitutivo de un delito contra la fauna y puede suponer para los autores una pena de prisión de hasta dos años.

Ante las pruebas incriminatorias, el pasado jueves se le localizó e instruyó diligencias judiciales por su implicación en los hechos, y fueron entregadas en el Juzgado de Instrucción de Fregenal de la Sierra.