Kia, el gato que se refugió del temporal en el capó de un coche busca un nuevo hogar
Una peculiar historia es la que ha protagonizado un pequeño cachorro de gato que acabo atrapado en el interior del capó de un coche.
Poder sacar al animal del interior del vehículo no fue una tarea fácil y un mecánico profesional fue la persona que tuvo que trabajar durante horas para no hacer daño al animal y sacarlo del turismo.
Los gatos buscan cualquier sitio con un mínimo de calor para refugiarse del frío y entre sus lugares preferidos se encuentran los coches, tanto debajo como dentro del capó o en las ruedas. Pero ésta no sólo es una costumbre de los gatos que viven en la calle, sino también de los domésticos. Los daños que sufren los gatos que se meten en el capó de los coches pueden ir desde simples arañazos hasta asfixia e incluso costarles la vida.
Lo cierto es que no ha sido tarea fácil sacar al cachorro del interior de la maquinaría del turismo y ha habido que desmontar algunas estructuras delanteras del coche. Además del susto y del incidente que puede ocasionar el hecho de que un gato se meta en el capó, el vehículo también puede sufrir algunas averías por el alojamiento de un elemento extraño que impide que los distintos elementos mecánicos funcionen con normalidad.
"Ha costado lo suyo sacarlo y por suerte todo ha salido bien", explicaron públicamente desde el taller mecánico en el que trabajaron por salvar al gato, que resultó ser hembra y ya le ha puesto de nombre Kia.
La gatita ya se encuentra en buenas manos. Ha sido la protectora de animales del Campo Arañuelo Kronos la que se ha hecho cargo del cachorro. Ahora, hay que buscar un buen hogar para este travieso animal.