La Diputación de Cáceres ha participado en el proyecto europeo Interreg Poctep Ciclosend_Sur, con el que se ha creado la Ciclosenda del Tajo, una ruta en bicicleta que lo largo de nueve etapas recorre el Geoparque Villuercas-Ibores-Jara, la Reserva de la Biosfera de Monfragüe y la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Tajo Internacional. Son  355 kilómetros desde Villar del Pedroso hasta Cedillo, atravesando 22 municipios y pedaleando sobre el Camino Natural del Tajo (GR 113), en un trazado totalmente ciclable y señalizado.

El objetivo principal de este proyecto, financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) a través del Programa Interreg V-A España-Portugal 2014-2020 (POCTEP), ha sido el fomento de una actividad turística de bajo impacto ambiental para permitir un crecimiento económico y social en la zona mediante el aprovechamiento del patrimonio existente en materia de infraestructuras de movilidad activa.

Ciclosend_Sur ha permitido identificar este itinerario no motorizado como recurso eco-turístico y proponer un plan de acción para su ampliación y mejora. De esta forma, se promueve la conservación, valorización y dinamización socioeconómica del territorio, implicando el tejido empresarial en esta propuesta de turismo sostenible.

LA CICLOSENDA DEL TAJO

El Camino Natural del Tajo tiene una longitud de algo más de 1000 kilómetros desde su nacimiento en los Montes Universales, hasta la frontera portuguesa en Cedillo. El tramo que discurre por la provincia de Cáceres tiene una longitud aproximada de 355 km. Este camino natural ha sido homologado como sendero de gran recorrido (GR-113) por la Federación Española de Deportes de Montaña (FEDME).

Es un camino, que en su origen fue diseñado, prioritariamente, para la práctica del senderismo. La ciclosenda del Tajo ha permitido la puesta en valor de este itinerario para cicloturismo, convirtiendo la totalidad del trazado en ciclable para ofrecer una experiencia apasionante sobre la bicicleta.

El proyecto ha conseguido mejorar la conexión territorial entre las regiones potenciando y creando diferentes rutas ciclo peatonales, tratando el territorio como un continuo, sin fronteras, para el desarrollo de una actividad turística responsable y respetuosa con el medio, pero también para facilitar una movilidad local sostenible. Se han realizado actuaciones para crear una red de ciclosenderos, además de redactarse un Plan de Acción a 2030, creando un modelo de gestión conjunta, una estrategia de Promoción turística, y herramientas específicas para fomentar el emprendimiento empresarial.

LAS NUEVE ETAPAS

El primer tramo da inicio al itinerario de la Ciclosenda del Tajo en el límite provincial con Toledo para entrar en la provincia de Cáceres y seguir parte del Camino Natural del Tajo, uno de los tramos del río con mayor número de espacios naturales desde su nacimiento. Los paisajes se irán vistiendo con olivos, almendros, encinas y el impresionante patrimonio geológico del Geoparque Villuercas-Ibores-Jara. La última parada de esta primera etapa será Peraleda de San Román y los vestigios romanos que se esconden entre los canchos que lo rodean.

 

La segunda etapa de la Ciclosenda del Tajo transcurre por la Comarca de los Ibores, siguiendo el Camino Natural del Tajo, que combina senderos y carretera. Después de despedir Peraleda de San Román, los campos se llenan de olivares como preludio a algunas de las estampas más bonitas del Embalse de Valdecañas. Entre las paradas imprescindibles de la etapa se encuentra el Templo romano de los Mármoles, pero tampoco debemos dejar de maravillarnos con los paisajes pétreos que nos mostrará el Geoparque Villuercas-Ibores-Jara.

La ruta continúa por un espacio que está protagonizado por encinas y alcornoques que perfilan la dehesa extremeña. Más adelante, los embalses se suman al paisaje definiendo uno de los trayectos donde la naturaleza indómita está más presente, especialmente gracias al Parque Nacional y Reserva de la Biosfera de Monfragüe, por donde discurre gran parte de la ruta bajo la atenta mirada de las grandes aves que lo sobrevuelan.

La cuarta etapa discurre en su primer tramo por el Parque Nacional y Reserva de la Biosfera de Monfragüe, haciéndonos descubrir sus encantos más recónditos. La flora y fauna que lo circunda nos guiará, por la Cañada Real de Trujillo y las sierras de la Herrera, de Enmedio y de la Cueva, hasta Serradilla, donde admiraremos sus ermitas y el Santuario del Cristo de la Victoria y podremos relajarnos bajo el Pinar de Serradilla, otro punto de gran biodiversidad.

Continuamos el camino por un nuevo tramo, la quinta etapa de la Ciclosenda del Tajo, que transcurre principalmente por carreteras comarcales que atraviesan dehesas, campos de cultivo y tierras de ganadería a los pies de la sierra de Santa Catalina. Un entorno insólito donde contemplar aves y otros animales de la zona. Casas de Millán y Cañaveral serán los dos núcleos urbanos en los que podremos tomar fuerzas y visitar su patrimonio, compuesto principalmente por edificios religiosos.

La sexta etapa transcurre desde Cañaveral hasta Garrovillas de Alconétar pasando por el embalse de Alcántara y sus vestigios romanos emergiendo de las aguas. Esto es lo que nos espera en esta sexta etapa de la Ciclosenda del Tajo, que discurre por senderos comunes al Camino de la Plata y finaliza ante una de las plazas más grandes de España.

El camino continúa para los amantes de la bicicleta por un tramo entre almendros, encinas, olivos y pinares que esbozan la primera parte de esta etapa de la Ciclosenda del Tajo, que terminará a las puertas de la Reserva de la Biosfera Transfronteriza del Tajo Internacional, en el emblemático Puente romano de Alcántara. La historia de esta localidad, en la que se han encontrado vestigios que se remontan al Paleolítico, está marcada por sus iglesias, ermitas, conventos, palacios y casas solariegas.

La penúltima etapa nos conduce hasta Alcántara, escoltados por su importantísimo legado histórico. Emprendemos la octava etapa de la Ciclosenda del Tajo, que transcurre a unos kilómetros del río más largo de la península para llegar a Carbajo, pasando antes por Membrío y sus tumbas antropomorfas. De esta etapa nos quedamos con los impresionantes entornos que nos acompañarán durante todo el camino: la Reserva de la Biosfera Transfronteriza del Tajo Internacional, los Llanos de Alcántara y Brozas y la Sierra de San Pedro.

Y finalizamos en el noveno tramo, la última etapa de la Ciclosenda del Tajo, que discurre por la Reserva de la Biosfera Transfronteriza del Tajo Internacional, por lo que la vegetación estará bastante presente, especialmente aromatizada por jaras. A nuestro paso encontraremos tumbas antropomorfas y dólmenes que componen parte del preciado patrimonio de la zona. Después de dejar atrás Cedillo, última localidad de la ruta, una bonita carretera panorámica nos guiará hasta la presa de Cedillo, donde el Tajo sigue su descenso por Portugal y nosotros pondremos fin a nuestra aventura.

TERRITORIOS UNESCO

Los territorios reserva de la biosfera nacieron en 1976 como propuesta de la UNESCO con el objetivo de conseguir una integración armoniosa entre la gente y la naturaleza, potenciando el desarrollo sostenible, la mejora del conocimiento, la mejora de la vida de los habitantes de estos territorios y la puesta en valor de los valores culturales y sociales de sus pueblos. Los objetivos marcados por la UNESCO para las reservas son:

- Conservación: de la naturaleza, la flora, la fauna y los ecosistemas del territorio.

- Desarrollo: de un sistema económico sostenible en torno a los valores sociales y culturales.

- Cooperación: apoyar la investigación, vigilancia, enseñanza e intercambio de información relacionados con los problemas locales.

La Reserva de la Biosfera de Monfragüe fue reconocida en 2003 por ser un territorio representativo de la vegetación mediterránea en el que se ha mantenido una armonía entre los valores naturales y la progresiva y equilibrada intervención humana. Con el Parque Nacional de Monfragüe como núcleo principal y a su alrededor se establece una zona donde se desarrollan actividades educativas, de investigación o turísticas. La zona más amplia de la Reserva, que rodea este núcleo, alberga la mayoría de los pueblos y cuenta con grandes extensiones de dehesa y monte bajo dedicadas desde hace siglos a explotaciones en extensivo, fundamentalmente ganaderas, forestales y cinegéticas.

La Reserva de la Biosfera de Monfragüe es especialmente conocida por su gran biodiversidad. A lo largo de sus más de 116.000 hectáreas podemos encontrar en nuestra ruta en bicicleta variedad de paisajes, desde extensas zonas de matorrales hasta estrechos bosques de alisos y fresnos ligados a los ríos y arroyos. En este rico entorno podemos observar algunas de las mayores colonias de buitre negro, águila imperial, cigüeña negra, búho real o buitre leonado de Europa e, incluso, del mundo. Con una densidad de población muy baja, la Reserva de la Biosfera trabaja para cohesionar la zona y crear un desarrollo sostenible que mantenga la población y proporcione oportunidades de crecimiento ligadas al cuidado y la conservación del entorno.

La Reserva de la Biosfera de Tajo Internacional es un destino para viajeros de verdad y ofrece un sinfín de oportunidades para quienes quieran convertir la bicicleta en su medio de transporte. Pocos lugares como éste son capaces de reunir, en un mismo espacio, tanta biodiversidad, fusión de culturas, riqueza patrimonial y gastronómica, y maneras de sentir y vivir… Conoce qué es el Tajo Internacional, sus valores más destacados, sus diferentes figuras de protección y qué hacemos para conservarlo.

La Reserva de la Biosfera Tajo Internacional cuenta con numerosas figuras de protección reconocidas a nivel regional, europeo y mundial. El objetivo principal de todas ellas es garantizar la conservación de los valores naturales y culturales que atesora este territorio fronterizo. La Red Ecológica Europea Natura 2000, el Parque Natural Tajo Internacional en España y el Parque Natural do Tejo Internacional en Portugal, el Parque Internacional Tajo-Tejo o la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Tajo-Tejo Internacional son las principales áreas protegidas que encontramos en este territorio.

El Geoparque Villuercas Ibores Jara es una unión por descubrir. Un Geoparque Mundial de la UNESCO, como Villuercas-Ibores-Jara, es un territorio que cuenta con un patrimonio geológico de valor internacional visible en la calidad estética de su paisaje y reconocible por las historias científicas, turísticas y educativas  que pueden ser escuchadas mientras lo visitamos.

El patrimonio geológico, junto con el resto del patrimonio natural y el cultural, representan para la sociedad de su territorio la base de su propia estrategia de desarrollo sostenible. Los Geoparques desarrollan además una amplia cooperación nacional e internacional que, sin duda, genera nuevas experiencias, oportunidades e iniciativas que facilitan el crecimiento y la puesta en valor del medio rural en el que se incardinan.

Uno de los pueblos más bonitos de España, y, por ende, de Extremadura, y uno de los pocos geoparques del país. La Puebla de Guadalupe, con su Real Monasterio, Patrimonio Mundial de la Humanidad desde 1993, y el Geoparque Mundial de la UNESCO Villuercas Ibores Jara forman un conjunto patrimonial  para descubrir, comprender y disfrutar.

CÓMO LLEGAR Y SERVICIOS

La estación de tren y bus más cercana al inicio de la ruta es la de Navalmoral de la Mata. Hay varias empresas que prestan servicio de transfer de personas, equipajes y bicicletas a lo largo de toda la ruta, tanto para iniciar como para gestionar el regreso. También disponen de bicicletas en alquiler:

Bikes at forest https://www.bikesatforest.com/

Jalama Outdoor https://jalamaoutdoor.com/

La totalidad del trayecto está señalizado, atendiendo a criterios de sostenibilidad, eficacia y eficiencia, minimizando el impacto visual de la señalización en el terreno y ajustándose al manual de señalización turística de la Junta de Extremadura. Estas son las distitnas señales que encontrará el viajero durante el trayecto.