La situación en el sector del ovino en Extremadura se torna cada vez más crítica, con la lana de oveja como gran preocupación. La organización agraria APAG Extremadura Asaja ha resaltado una "grave situación de crisis" que ha engullido al mercado de la lana, dejando pérdidas estimadas en unos 17 millones de euros.

Juan Metidieri, presidente de APAG Extremadura Asaja, destacó durante una rueda de prensa en Mérida el cambio drástico en la percepción de la lana, pasando de ser una fuente de ingresos a convertirse en un "residuo incómodo". La falta de demanda ha dejado a la lana sin salida en el mercado extremeño, con compradores insinuando su retirada a coste cero.

Metidieri detalló que el coste de esquileo por unidad ha disminuido considerablemente en los últimos cinco años, lo que ha contribuido a un panorama desolador para los ganaderos. Con un censo de ovino que supera los 2.6 millones de cabezas en Extremadura, los gastos asociados al esquileo se traducen en pérdidas sustanciales para el sector.

Ante esta situación desafiante, Metidieri hizo un llamado a las autoridades para habilitar puntos limpios destinados al tratamiento de la lana, tomando como ejemplo las medidas implementadas en Aragón. Además, instó a incentivar la investigación para encontrar nuevos usos para la lana, con el objetivo de integrarla en una economía circular y mitigar así las oscilaciones de precio en los mercados.

En medio de esta crisis, el sector ovino extremeño busca desesperadamente soluciones que permitan revitalizar un mercado vital para la economía regional y garantizar la sostenibilidad de la industria a largo plazo.

En la foto, el presidente de APAG Extremadura Asaja, Juan Metidieri.