Una empresa de multiservicios telefónicos y los representantes de los trabajadores en Cáceres han llegado a un acuerdo para que los 50 empleados que iban a ser trasladados a Madrid puedan teletrabajar desde la capital cacereña, mientras que otros 12 serán ubicados en otros servicios pero también permanecerán en la ciudad, aunque podrían ver modificada su jornada laboral.

Así se ha resuelto finalmente este conflicto colectivo que afectaba a 62 empleados que la empresa quería reubicar, con la propuesta de traslado a la capital cacereña para medio centenar de ellos.

Esta situación ha provocado durante la semana pasada varias protestas de la plantilla de Atento en Cáceres que secundaron una huelga por oponerse al traslado de estos empleados, ya que supondría un grave problema familiar para ellos, algunos de los cuales llevan más de veinte años trabajando en la ciudad en este centro de atención telefónica que presta servicio a diferentes empresas.

Las protestas llegaron incluso a las puertas del ayuntamiento cacereño y el alcalde Rafael Mateos se comprometió a mediar en el conflicto, al igual que el consejero de Economía de la Junta de Extremadura, Guillermo Santamaría, con quien también se reunieron los representantes sindicales.

El presidente de Comité de Empresa, José María Boyero, ha explicado que se ha decidido firmar la propuesta de Atento tras varias reuniones ya que "es la decisión menos gravosa con el escenario por el que atraviesa la compañía".

Así, se evita el traslado de este medio centenar de trabajadores que estaban afectados por el conflicto laboral y los que no quieran acogerse a esta medida recibirán una indemnización de 30 días por cada 14 meses de antigüedad en la empresa.

Atento, que comenzó a operar en Cáceres en julio de 2000, llegó a tener más de 400 trabajadores pero la plantilla se ha ido reduciendo progresivamente por los avances tecnológicos y la deslocalización de la empresa a países como Colombia o Marruecos. En la actualidad cuenta con 270 trabajadores que prestan servicio a empresas como Movistar o El Corte Inglés.

Además, cabe recordar que, actualmente el 70% de la plantilla de teletrabaja desde su domicilio, una situación que puede mantenerse o extenderse sin necesidad de cambio geográfico, ya que muchos de ellos tienen salarios bajos al no tener jornadas completas y mover a los trabajadores a Madrid supondría un problema económico para las familias.