Tener un siglo de vida a sus espaldas es un privilegio que sólo algunos afortunados pueden contar. Uno de ellos es Cándido Repilado que, a sus 100 años, ha pasado a formar parte de ese exclusivo club de los abuelos más longevos de Extremadura.

Repilado que vive en Moraleja se encuentra "con sus cosillas, pero bien", tal y como explicó en Radio Interior,  Trinidad Repilado, hija de este extremeño que pasó una guerra, tuvo siete hermanos, vivió dos dictaduras y que afrontó la vida ayudando mucho a su madre ya que su padre murió joven cuando ellos eran sólo unos niños.

Lo cierto es que los hermanos siempre estuvieron muy unidos, "trabajando de día y a la escuela de noche" para tener un futuro próspero, recuerda Trinidad. Repilado asegura que su madre fue muy estricta para que todos los hermanos pudieran salir adelante y tener un buen futuro.

Con motivo de su cumpleaños, Cándido ha recibido decenas de felicitaciones de sus familiares y amigos y en la lista no ha faltado la visita del alcalde de Moraleja, César Herrero, quien conoce a Repilado desde que era un niño.

Trinidad recuerda que Cándido, que trabajó en la Confederación Hidrográfica del Tajo de guardacanal,  llamaba al que ahora es alcalde de Moraleja, "el aguaor",  porque sus padres, cuando era sólo un niño le mandaban  en el campo a buscar agua y "César se entretenía con nosotros a hablar, y mi padre le apodó como el aguaor". 

Ahora, el primer edil ha tenido la oportunidad de felicitarle personalmente en su 100 cumpleaños. "Le deseo salud para seguir viviendo cada día con la misma ilusión y con el cariño de su familia", explicó Herrero.