Cáceres en Helga de Alvear
Necesitaba un museo que significase su futuro. Cáceres se impuso como la ciudad perfecta. En 2006 se constituyó la Fundación Helga de Alvear. En 2010 se inauguró el Centro de Artes Visuales. En 2021 se inauguró el Museo Helga de Alvear.
Hemos podido ver diversas versiones sobre cómo llegó a Cáceres la colección de arte de Helga de Alvear (Kirn,Nahe, Renania-Palatinado, Alemania, 1936; Madrid, 03/02/2025), las tres con el presidente Rodríguez Ibarra de anfitrión.
Lo contaba Helga en un artículo necrológico publicado en el diario “El País”: “Había ofrecido su colección a Madrid, Córdoba, Vigo, San Sebastián y Granada. Mi única condición era que construyéramos un edificio nuevo, no quería un palacio antiguo renovado. La casualidad quiso que coincidiera en el restaurante Atrio de Cáceres con Rodríguez Ibarra. Ella iba con José María Viñuela [1], origen extremeño, muy conocido de Ibarra, y entonces director de la colección de arte del Banco de España. La propuesta cuajó y, después de bastantes dificultades, el Museo abrió sus puertas en febrero de 2021. Al final, ella asumió el coste tanto del continente como del contenido, maravillosamente expuesto en el edificio blanco creado por Mansilla + Tuñón Arquitectos.” [2]
En su propio blog, [3] Rodríguez Ibarra confesaba su entrevista con ella, acompañado por Viñuela y José Polo en 2003: “Me siento satisfecho por haber confiado en una persona como ella, que ha dado un importante impulso a la ciudad de Cáceres, en contraste y como complemento de su importante e impresionante conjunto de murallas y torres defensivas, de su pasado romano, almohade y judío, de su arquitectura civil y religiosa y de su espectacular conjunto de palacios y casas nobles, únicos en Europa… No sabía nada de arte contemporáneo. Me dejé guiar por mi intuición. Tantos años tratando y conociendo a tantas personas me enseñaron a distinguir la verdad de la mentira. Helga no falló. Extremadura, junto a Cáceres, llora por su fallecimiento y mantendrá ese excelente museo como recuerdo para siempre de su impulsora. Helga era todo verdad…”
Tras la primera entrevista con Rodríguez Ibarra, este le confesó: “La Administración va despacio, pero esa colección se queda en Cáceres”, convencido del ofrecimiento y su apuesta por ella.
En otro periódico madrileño [4] se dice que “nadie pone en duda que la colección de arte contemporáneo de Helga de Alvear es una de las más relevantes de Europa… Necesitaba un museo que significase su futuro. Cáceres se impuso como la ciudad perfecta. En 2006 se constituyó la Fundación Helga de Alvear. En 2010 se inauguró el Centro de Artes Visuales. En 2021 se inauguró el Museo Helga de Alvear… Rindamos ahora homenaje a la generosidad de Helga de Alvear a través de sus dos grandes amigos: José Polo y Toño Pérez, corresponsables directos del desembarco del Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear y su fascinante colección en la ciudad”.
Fruela Zubizarreta pregunta a José Polo cómo se fraguó el Museo y esta contesta: “Vino a cenar con José María Viñuela y con el artista portugués José Pedro Croft. Me quedé de sobremesa con ellos. Hablamos de su colección y abiertamente le pregunté que tenía pensado hacer con ella. Me contestó que donarla al Estado y yo, ¿pero al español o al alemán? Al español, por supuesto, yo soy española, respondió. Seguimos hablando y, claro, salió el tema de si ya tenía en mente alguna ciudad o institución. Nos comentó que había tenido una propuesta de San Sebastián y otra de Granada, pero que no había llegado a buen término porque los tiempos políticos son una cosa y la realidad, otra. Entonces, se me ocurrió decirle: ¿y por qué no instalas la colección aquí, en Cáceres? ¿Me dejas que hable con Juan Carlos Rodríguez Ibarra –presidente de la Junta de Extremadura entre 1983 y 2007—y se lo proponga? Recuerdo que incluso mencioné un edificio vacío, la antigua Escuela de Magisterio.
A Helga le pareció bien y decidimos volver a vernos. Semanas después nos invitó a comer en su casa y ahí acordamos un periodo de seis meses para intentar sacar el proyecto adelante. Me dio medio año y el compromiso de que, viniera quien viniera y ofreciera lo que ofreciera por su colección, Cáceres tendría preferencia… Hablé con Javier Castaño, jefe de Protocolo de la Junta por entonces, y le pregunté: ¿cómo hablo con el presidente? Me pasó su correo electrónico y ahí le esbocé el proyecto, sobre todo para que no me tomase por loco. Ibarra me contestó muy amablemente, avisándome de que me llamarían del gabinete de Presidencia para concertar una cita. Y así fue.” La visita se produjo en 2003.
El 25 de febrero de 2021, Sus Majestades los Reyes inauguraban el Museo de Arte Contemporáneo de la Fundación Helga de Alvear.
Y después vinieron los reconocimientos: Medalla de Extremadura en 2007, Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes 2008, Medalla de Oro del Ayuntamiento de Cáceres en 2011, Académica de Honor de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes 2021, Medalla al Mérito Cultural de la República Portuguesa en 2024, entre otras muchas distinciones. Fue la última vez que estuvo en Cáceres.
Fue el 25 de enero de 2024 cuando el ministro de Cultura de Portugal le hizo entrega en el Museo de su nombre de la Medalla al Mérito Cultural del país vecino, en presencia del ministro de Cultura español, Ernest Urtasun; la presidenta de la Junta, María Guardiola, el expresidente del Gobierno, Felipe González, y el presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales.
Antes pudimos verla en el monasterio de Yuste durante la entrega del Premio Europeo “Carlos V” a la canciller de la República Federal de Alemania, Ángela Merkel, por el rey de España, Felipe VI, como reconocimiento a su larga trayectoria al servicio de Europa, acto celebrado el 14 de octubre de 2021. En primera fila entre el público asistente que la recibió a las puertas del monasterio, la señora Merkel y Helga de Alvear intercambiaron unas palabras, seguramente en alemán, lengua materna de ambas. Dos mujeres nacidas en Alemania y que han dejado una estela universal, política y europea la primera, y del arte la segunda, que hoy condensa, junto a la ciudad antigua de Cáceres, Patrimonio de la Humanidad, por su “otoño de la Edad Media” en ella habitado, otro legado del arte contemporáneo para el mundo.