Agentes de la Policía Nacional, adscritos al grupo de estupefacientes de la Comisaría Provincial de Badajoz, han detenido a cinco personas acusadas de pertenecer a un  grupo criminal  y actuar contra la salud pública.

Los detenidos son cuatro hombres y una mujer, de entre 35 y 55 años de edad, uno de ellos con antecedentes, quienes tras la instrucción del pertinente atestado fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, decretando el ingreso en prisión de tres de ellos.

La investigación comenzó hace un año, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de un grupo de personas que pudiera estarse dedicando a la introducción, en Badajoz, de importantes cantidades de heroína y cocaína, para su posterior distribución a otros traficantes de mediana escala, quienes, a su vez, surtirían a diversos puntos de venta de estas sustancias en esta ciudad y su provincia.

Los policías comprobaron que este grupo criminal, con estructura piramidal, estaba liderado por un hombre sobradamente conocido por sus antecedentes policiales por hechos similares, al que el resto de componentes seguían sus instrucciones para eludir cualquier intervención policial.

Cabe destacar que utilizaban sofisticados medios técnicos de comunicación, con el fin de pasar desapercibidos y evitar exponer sus citas  contactos, de lo que se desprende su estabilidad y duración en el tiempo.

Al tener los investigadores conocimiento de una posible transacción de heroína de forma inminente, el día 23 de mayo se estableció un dispositivo de vigilancia, comprobando que el  cabecilla viajaba solo en su vehículo, haciendo labores de “lanzadera”, por la ronda de Circunvalación de Badajoz, mientras que, a una distancia prudencial, circulaba el vehículo que trasportaba la carga.

Finalmente los agentes intervinieron ambos vehículos y detuvieron a estas cinco personas integrantes de este grupo criminal.

El segundo vehículo trasportaba 2.123 gramos de heroína dispuesta en envases plastificados para evitar ser detectados por los guías caninos. Dicha sustancia se encontraba en el interior de un habitáculo dispuesto al efecto en el lugar donde el vehículo debería llevar el airbag delantero. Esta “caleta” estaba perfectamente disimulada en la estructura del vehículo, con un complejo sistema de apertura.

Con la debida autorización se realizaron dos registros domiciliarios en la barriada pacense del Cerro de Reyes y se intervinieron, además, cinco vehículos y una máquina envasadora- plastificadora.