La compañía que tiene previsto levantar la fábrica de Trujillo se fundó en 2012 en Silicon Valley (California) y cuenta entre sus inversores con el actor de Hollywood Leonardo DiCaprio, activista en la mejora del medio ambiente para revertir las consecuencias del cambio climático.

En junio de 2021, el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, firmó en Mérida un protocolo con el consejero delegado de Diamond Foundry, Martin Roscheisen.

La planta de Trujillo aplicará el diamante en la fabricación de semiconductores, una tecnología que aumenta su demanda a nivel mundial con aplicaciones en las redes de comunicación 5G y en la industria del vehículo eléctrico.