La Guardia Civil ha investigado a un vecino del municipio pacense de Mérida, por conducir un vehículo de manera temeraria al hacerlo en sentido contrario al establecido con manifiesto peligro para la vida de los demás usuarios de la vía, y bajo la influencia de bebidas alcohólicas.

La actuación tuvo lugar la madrugada del pasado domingo, cuando varios usuarios de la autovía A-5 que circulaban a la altura del término municipal de Calamonte, informaron a la central de emergencias de la circulación de un turismo en sentido contrario al establecido hacia Badajoz, con el grave riesgo de causar un accidente.

Por diferentes patrullas pertenecientes al Subsector de Tráfico de esta provincia, se establecieron los dispositivos de servicios para tratar de localizarlo, y extremando todas las medidas de seguridad lograron interceptarlo en el término de Talavera la Real.

Una vez identificado su conductor, vecino de Mérida, los agentes le realizaron las pruebas de detección de alcohol y drogas legalmente establecidas, constatando como superaba casi cinco veces la tasa de alcohol permitida (0,25 mg/l) arrojando un resultado de 1,19 mg/l de aire espirado, y arrojando un resultado positivo en el test indiciario de drogas que mostraba la presencia de sustancias estupefacientes o psicotrópicas en su organismo. Circunstancia esta última, pendiente de ser confirmada tras los análisis del Laboratorio de la Dirección General de Tráfico.

En base a los citados hechos y síntomas externos, mostrando encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas, las cuales, alteraban las facultades psicofísicas necesarias para una conducción segura, el vehículo fue retirado de la vía y quedó inmovilizado hasta que desaparecieran las causas que lo motivaron.

Al conductor se le instruyeron diligencias por dos delitos contra la seguridad vial, al conducir de manera temeraria con manifiesto desprecio para la vida de los demás y conducir bajo la influencia de las bebidas alcohólicas, siendo remitidas al Juzgado de Instrucción de Badajoz.

Ahora se enfrenta a penas de prisión de tres a seis meses o con multa de seis a veinticuatro meses, y con la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo entre uno y seis años.

El Sector de Tráfico de la Guardia Civil de Extremadura agradece la colaboración ciudadana, que es siempre fundamental para prevenir y actuar ante esta clase de delitos, contribuyendo con ello a erradicar el consumo de alcohol y drogas al volante que pone en grave riesgo al resto de usuarios.