La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Cáceres ha decretado este sábado prisión provisional comunicada y sin fianza para el alguacil de Hinojal, José María Lindo, tras haber confesado que mató a su vecino, Vicente Sánchez, que llevaba desaparecido desde el pasado 27 de enero.

El empleado municipal es el único detenido por la muerte del vecino de Hinojal, cuyo cuerpo sin vida fue localizado en el día ayer en una finca a dos kilómetros del municipio tras llevar desaparecido desde enero.

El detenido ha pasado a disposición judicial esta mañana y ha estado declarando durante algo menos de una hora en donde ha reconocido los hechos que se le imputan. Las diligencias se instruyen por los presuntos delitos de homicidio, estafa y robo con violencia.

La víctima fue vista por última vez el 27 de enero y su familia tardó tres días en denunciar su desaparición. Desde el primer momento, y tras descartarse su huida voluntaria, se barajó la hipótesis de un móvil económico, ya que Vicente Sánchez tenía una situación económica desahogada tras haber resultado agraciado hace años con algunos premios importantes en distintos juegos de azar.

Después de 40 días de investigación, el pasado jueves la Guardia Civil procedió a la detención del empleado municipal, considerado desde el primer momento el principal sospechoso de la desaparición de su vecino. Aunque no eran amigos, ambos mantenían una buena relación de vecindad y el alguacil llevaba en su vehículo a la víctima a Cáceres o a los toros a cambio de pequeñas cantidades de dinero para sufragar el coste de la gasolina.

Dentro de la denominada "Operación Recuera", la Unidad Orgánica de la Policía Judicial (UOPJ) de la Comandancia de la Guardia Civil de Cáceres acotó el jueves diversas calles del municipio y procedió a la entrada y registro en dos domicilios para recabar pruebas que permitieran incriminar al principal sospechoso. Al mismo tiempo se incautó del vehículo del alguacil, que fue transportado en una grúa hasta Cáceres, y se practicó la entrada y registro en el domicilio del detenido en la capital cacereña.

Poco después de su detención, José María Lindo ofreció a los agentes los detalles necesarios para localizar el cadáver de su vecino, que se encontraba oculto bajo una encina en una finca de la dehesa boyal próxima a Hinojal y a la población de Hinojal. El viernes, el alguacil acompañó a los agentes hasta el lugar de los hechos donde se comprobó que, efectivamente, se encontraba el cadáver, al que se le está practicando la autopsia en el Instituto de Medicina Legal de Cáceres.

SECRETO DE SUMARIO

El caso está lleno de interrogantes que se irán conociendo una vez sea levantado el secreto de sumario. Aunque aún no ha sido identificado el cadáver, los familiares ya han asegurado que se trata de Vicente Sánchez. El cuerpo sin vida estaba oculto y no se ha precisado si estaba enterrado, ya que en esa zona se habían realizado varias batidas en las últimas semanas. La Guardia Civil no descarta que el cadáver fuese trasladado allí tras las batidas, y la inspección del vehículo del detenido podrá arrojar luz a este asunto.

La noticia ha dejado consternados y preocupados a los vecinos de esta localidad de apenas 400 habitantes, según ha explicado Teresa, prima de la víctima. Vicente era un hombre solitario de 79 años de edad que ni siquiera salía a caminar por el pueblo ni jamás se le conoció novia. Sus únicos desplazamientos eran a Cáceres o a municipios próximos, casi siempre en compañía del ahora detenido, a realizar recados o comprar lotería. Por eso la familia descartó desde el primer momento la hipótesis de que hubiese salido de Hinojal unos días de vacaciones.

"Queríamos que apareciera ya, vivo o muerto, pero que apareciera", ha explicado su prima, que desde el primer momento temió que alguien lo hubiese arrojado al río Tajo y Almonte, cuyos cauces fueron peinados por agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS).

La operación de la Guardia Civil se ha llevado con absoluta discreción para evitar filtraciones en un municipio tan pequeño en el que todos los vecinos se conocen. Lo que nadie pensaba es que detrás del homicidio se encontase el alguacil, un empleado municipal que llevaba tres décadas en el ayuntamiento y que guardaba buena relación con la víctima y que fue arrestado en el domicilio que compartía junto a su hermano, en el número 19 de la calle de La Cruz.

A medida que avance la investigación se irán conociendo más detalles acerca del suceso. La víctima era un hombre de 1,65 metros de altura, 75 kilos de peso y de complexión corpulenta, considerado persona vulnerable por SOS Desaparecidos. El día de su desaparición dejó su cama sin hacer y el teléfono móvil encima de la mesa, algo inusual en él.

El detenido, José María Lindo, tiene 56 años de edad y está considerado en el pueblo un hombre "tranquilo y afable" que nunca ha tenido problemas. Por eso su detención ha causado un "shock" y una tremenda sorprensa en la localidad, en palabras de su alcaldesa, Blanca Vivas. Sin ser amigos, el detenido y la víctima compartían viajes y aficiones. Ahora el ayuntamiento ha decretado tres días de luto oficial en señal de duelo.

En la imagen, a la izquierda, el alguacil de Hinojal, José María Lindo, que ha ingresado en prisión acusado de la muerte de su vecino, Vicente Sánchez Romero, que aparece a la derecha de la fotografía.

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