¿Puede la ciencia hacer frente a las fake news en el sector agroalimentario?
Las informaciones falsas afectan a la reputación social y al valor económico de toda la cadena agroalimentaria, de las propias empresas que se ven expuestas a la difusión de este tipo de informaciones.
El Grupo Alimentario de Innovación y Sostenibilidad (GIS) ha elaborado, en colaboración con el Consejo General de Colegios Veterinarios de España (COLVET), la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos (ANIA) y la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas (ETSIAAB), un “Manifiesto del valor de la Ciencia en la Agroalimentación”.
En los últimos años, la imagen de los productores y comercializadores de alimentos, así como su reputación social, se han visto mermados debido a innumerables noticias falsas o ideologizadas, que han hecho que la sociedad crea informaciones que no obedecen a la realidad y que nada tienen que ver con la verdad científica.
El manifiesto ha sido presentado en el Meeting Point de Agrifood con la participación de Luis Alberto Calvo, presidente del COLVET, de María Cruz Díaz, presidenta de ANIA, José Manuel Palacios, director de la ETSIAAB y de Juan Pascual, veterinario y divulgador científico.
Las informaciones falsas, parciales o sesgadas en el ámbito de la producción, transformación y consumo de alimentos, sobre todo relacionadas con la salud y la nutrición, no solo conllevan importantes riesgos para los consumidores por la alarma infundada que crea en la sociedad. También pueden afectar, en algunos casos seriamente, a la reputación social y al valor económico de toda la cadena agroalimentaria, de las propias empresas que se ven expuestas a la difusión de este tipo de informaciones falaces, que circulan y se viralizan sin cortapisa alguna por Internet y a través de las redes sociales cuestionando la calidad y la plena seguridad sanitaria de nuestros alimentos
El manifiesto quiere contribuir, por tanto, a poner la ciencia en el centro de la información del sector agroalimentario para mostrar a los consumidores y también a los legisladores, la realidad sobre los avances en materia de innovación y sostenibilidad (social, económica y medioambiental) que viene realizando la cadena de valor de alimentos de nuestro país.
El sector agroalimentario español es un motor esencial de la sociedad, sobre todo del medio rural, y de la economía de el país. El valor de la producción bruta agraria, a precios corrientes, superó los 65.500 millones de euros en 2023, y la renta agraria se elevó a más de 32.433 millones, ayudando a generar un Valor Añadido Bruto (VAB) en el conjunto del sector agroalimentario de 119.140 millones (casi un 9% del VAB total nacional) y contribuyendo con unas exportaciones récord de más de 70.430 millones en el pasado año.
Luis Alberto Calvo, presidente del COLVET, señaló que “hay que trabajar todos en conjunto de manera transversal para contrarrestar la desinformación en las redes sociales, y evitar que la producción agroalimentaria sea denostada ante la sociedad y los consumidores, con iniciativas como la de “One Health” (“Una Sola Salud”), que integra en un todo la salud humana y animal y la sanidad vegetal.”
En esta línea, María Cruz Díaz, presidenta de ANIA, declaró que “es muy importante en esta situación tan anómala, que luchemos de forma constante y pasemos a la acción para dar visibilidad a todo el trabajo que venimos ya realizando desde las instituciones académicas y sociales para combatir desde la ciencia y la tecnología las informaciones parciales, sesgadas y falsas que se difunden tan rápidamente de nuestro sector agroalimentario.”
Las conclusiones de la mesa dieron cuenta de la oportunidad de este manifiesto, pero recalcando a la vez la necesidad de que los que forman parte de las distintas instituciones científico-técnicas, junto a las administraciones públicas, grupos políticos, productores, transformadores y distribuidores, relacionados e involucrados con el sector agroalimentario, continúen realizando una labor más incisiva para contrarrestar las “fake news” sobre los alimentos, que se viralizan rápidamente en nuestra sociedad, creando alarma y confundiendo y desinformando a nuestros consumidores.