La Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX), en una nota de prensa comunican una manifestación en las puertas de su sede por estar en contra de la reducción de jornada laboral, señalando que una reducción de jornada sin incremento de la productividad es inviable, y recuerda a los sindicatos que firmaron un acuerdo de negociación colectiva que aún sigue vigente.

Desde la CREEX expresan que “como única organización que representa a todo el tejido productivo extremeño, muestra su respeto al derecho de manifestación de los sindicatos, pero también su profunda discrepancia con el planteamiento de las organizaciones sindicales por diferentes motivos.

La organización, explica que “no es de recibo que precisamente los sindicatos nos acusen de no querer negociar, cuando saben que dedicamos cientos de horas a llegar a acuerdos bipartitos para rubricar convenios. No podemos aceptar que se imponga por decreto una reducción de jornada sin tener en cuenta la tipología de las empresas (la inmensa mayoría de pequeño tamaño) y sectores de actividad con atención al público o atención las 24 horas, donde es imposible reducir esas horas de atención”.

Creen desde la CREEX, “que la reducción de jornada tiene que realizarse mediante negociación, y asumiendo los trabajadores su parte, en el sentido de mejorar o al menos igualar la productividad, algo que no se logra por decreto”. 

Manifiestan, que no se les puede acusar de no negociar cuando lo que se plantea es una “decisión ya tomada”, y que “el Gobierno ha lanzado globos sonda sobre bonificación de nuevos contratos, pero ni CEOE ni CEPYME han recibido un solo papel donde se detalle”.

Explica la organización que en las actividades donde sea necesario cubrir un turno completo, “¿dónde se van a encontrar trabajadores dispuesto a trabajar dos horas y media a la semana? Es algo que hemos preguntado y nadie ha respondido”.

“El Gobierno peca de deslealtad y no debería haberse inmiscuido en este asunto. Hace unos meses promovió el Acuerdo de Negociación Colectiva, donde acordamos organizaciones empresariales y sindicales, subidas de sueldo. Era en ese momento donde se debería haber planteado la reducción de jornada, y los sindicatos no lo hicieron, por lo que la falta de lealtad es extensible a estas organizaciones. ¿Dónde quedan aquellos aumentos pactados si una de las partes ya ha decidido saltarse lo acordado y además con el aval del Gobierno?”, han concluido desde la organización.