La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha participado en la inauguración de la exposición 'Rostros del Turuñuelo. Los relieves de Casas del Turuñuelo, Guareña (Badajoz)' en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid.

Una muestra en la que se podrán contemplar los conocidos "rostros" tartésicos encontrados en esta excavación y que "en apenas diez años han revolucionado el conocimiento que teníamos de esta civilización", ha remarcado la presidenta.

Al acto, que se ha celebrado este lunes en la Sala de Novedades Arqueológicas del museo madrileño, han asistido también la consejera de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deportes, Victoria Bazaga, y el ministro de Cultura, Ernest Urtasun.

"Toda tierra tiene su memoria y tiene su legado. Y conservarla, exponerla, compartirla con la ciudadanía, mostrar al mundo las raíces, nos hace considerarnos un mejor pueblo", ha afirmado la presidenta. En este sentido, ha incidido en que "Extremadura disfruta de su pasado y de su riqueza cultural, y para nosotros es un orgullo poderlo compartir ahora con los miles de visitantes que van a pasear por estas galerías".

Además, Guardiola ha destacado que "esta muestra, que es fruto de la tan necesaria colaboración entre instituciones, quiere difundir el rico patrimonio cultural nacional y extremeño, dar a conocer su originalidad y también el papel protagonista en la formación de la cultura de nuestro país, que es tan diversa, tan vasta y tan universal".

La jefa del Ejecutivo extremeño ha explicado que la investigación en el yacimiento de Casas del Turuñuelo comenzó en el año 2014, con un equipo del CSIC liderado por Sebastián Celestino y Esther Rodríguez, y que fue hace poco más de año y medio cuando "todos nos sorprendimos, incluso a los propios investigadores, con este hallazgo, con este descubrimiento de estas esculturas que hoy presentamos aquí en el Museo Arqueológico Nacional".

Un hallazgo que destacaron medios de comunicación de todo el mundo, la prensa especializada y que "nos acercan un poquito más" - ha añadido - "de los moradores de El Turuñuelo, de Cancho Roano o La Mata, tres de los enclaves protohistóricos más importantes de Extremadura y de toda la Península Ibérica".

"Estos rostros son las primeras manifestaciones artísticas de esta naturaleza en los territorios al interior del reino de Tartessos. Su calidad confirma el avanzado dominio técnico. Es una ejecución impecable, exquisita y refinada. Hipnotizan esos ojos almendrados. El aspecto ígneo de sus cabellos, esa técnica que sorprende a cualquier persona que lo vea. Son los rostros de aquellas personas que vivían en nuestras tierras hace 2500 años", ha subrayado la presidenta.

Asimismo, Guardiola ha recordado que el Museo Arqueológico Nacional "custodia y exhibe otros tesoros procedentes de mi tierra, de Extremadura", como el tesoro de Aliseda, los torques de oro de Sagrajas y Berzocana o estelas, jarros, copas, esculturas e inscripciones "de todos los momentos de nuestra rica historia". Además, ha reseñado que "hace 25 años uno de los llamados ídolos-placa prehistóricos, procedente del propio entorno urbano de Badajoz, fue seleccionada como 'pieza del mes' en este mismo museo".

Finalmente, la presidenta de la Junta de Extremadura ha agradecido el trabajo de todo el equipo investigador del yacimiento de Casas del Turuñuelo "por su perseverancia, por su vocación científica y por esa búsqueda incansable de las claves que nos desvelan de dónde venimos". Un trabajo que ha continuado con otros descubrimientos, como parte de otra escultura realizada con material que podría haber salido de las mimas canteras que los relieves del Partenón de Atenas.

"Caminamos de su mano hacia el ayer, hacia lo más profundo de nuestra esencia, de nuestra tierra y de nuestros secretos. Y le puedo asegurar a todos ustedes que está siendo un viaje inolvidable", ha concluido Guardiola.

La exposición temporal se podrá visitar hasta el próximo 2 de febrero en el MAN, y después, los rostros del Turuñuelo volverán al Museo Arqueológico Provincial de Badajoz, como ha confirmado su director, el arqueólogo Javier Heras.