El Ayuntamiento de Navalmoral de la Mata ha pasado en 48 horas de pedir comprensión a los vecinos por las obras del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) que han suprimido los pasos a nivel en la localidad, a denunciar al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana por "falta de planificación, incumplimiento de compromisos y dejadez".

Hace dos días, el ayuntamiento pidió "comprensión y colaboración a los vecinos" al anunciar que a partir del 5 de marzo se procedería al corte definitivo de los dos pasos a nivel del municipio y a la apertura al tráfico la travesía de la carretera Nacional V a la altura de rotonda de la carretera de Rosalejo.

En esa fecha informó oficialmente a los ciudadanos que a partir de este jueves día 6, los vehículos y peatones ya no podrían circular por los pasos a nivel de la localidad, teniendo que utilizar los nuevos accesos habilitados.

"Se trata de una intervención que, una vez ejecutada, requiere que todos nos adaptemos a los cambios en la movilidad", dijo el martes de Carnaval el ayuntamiento en un comunicado, en el que también destacaba que quedaba habilitada la pasarela peatonal junto a la gasolinera Moya o junto a la estación de autobuses. 

El consistorio dijo entonces que esa pasarela permitiría conectar "ambos lados de la vía, garantizando la movilidad peatonal tras el cierre del paso a nivel de esta zona".

Con la vuelta a las aulas una vez finalizado el Carnaval,  ha podido más la presión vecinal, y el ayuntamiento se ha visto obligado a dar una vuelta de tuerca a lo dicho hace dos días. El consistorio dice ahora que con el cierre de los pasos peatonales del tren no se ha cumplido con las medidas de accesibilidad prometidas, una cuestión que, según sus cálculos, afecta "gravemente a más de 1.500 vecinos", incluidos los estudiantes que dependen de estos accesos para acudir a sus centros educativos.

En un nuevo comunicado difundido este jueves, el equipo de gobierno asegura que hace meses, los responsables de obra de ADIF se reunieron con los directores de los centros educativos afectados y adquirieron el compromiso de garantizar la accesibilidad durante el desarrollo de los trabajos. Pese a ello, el ayuntamiento lamenta que las obras se encuentran sin finalizar, con escaleras sin construir y sin medidas alternativas eficaces para garantizar el tránsito seguro de los ciudadanos.

El alcalde, Enrique Hueso, ha manifestado hoy que "no puede estar callado ni consentir la situación de indefensión" a la que están siendo sometidos y ha ido más lejos al indicar que la situación "se antoja peligrosa".

Después de varios meses de obras, el ayuntamiento reconoce que se está generando un caos en el casco urbano debido a la improvisación y que esta situación pone en riesgo a los vecinos.

Para el equipo de gobierno moralo, "el incumplimiento de los compromisos adquiridos por el Ministerio y las declaraciones del señor Puentes en la Junta de Extremadura han quedado en papel mojado".