Ángel Benito, uno de los cinco detenidos del clan de los Hilarios por el tiroteo en el barrio San Lázaro de Plasencia en el que murió una niña de dos años, se ha dado a la fuga.

El detenido tenía decretada la libertad provisional los fines de semana y se encontraba cumpliendo una condena de 20 años por tráfico de drogas en régimen de tercer grado en el Centro de Inserción Social (CIS) de la cárcel de Cáceres.

Benito fue detenido la tarde del domingo 30 de marzo, horas después del tiroteo. Estuvo en los calabozos hasta el 1 de abril, que fue trasladado a los juzgados para prestar declaración.

Una vez que fue puesto en libertad por el tiroteo, tendría que haber vuelto a la cárcel por sus propios medios, cosa que no ha hecho.

Su tío, también llamado Ángel Benito y jefe del clan junto a su hermano y padre del fugado, se mantiene en paradero desconocido desde que el 15 de febrero se fugara de la cárcel de Valladolid, donde cumplía la condena a más de 20 años por delitos contra la salud pública, falsedad documental y blanqueo de capitales.

La Audiencia Provincial de Cáceres ha emitido la orden de busca y captura de Ángel Benito, tras darse a la fuga mientras cumplía condena de 20 años por tráfico de drogas.