Estas instalaciones, que contarán con una innovadora tecnología de biodiscos, permitirán tratar de forma eficiente las aguas residuales de ambas localidades, evitando así el vertido de más de 82.000 metros cúbicos al año al río Guadalquivir.
Las llamas han consumido alrededor de 950 hectáreas de dehesa y matorral, según los últimos datos.
Durante la pasada noche, 18 efectivos han trabajado en las labores de extinción del fuego, con seis unidades terrestres, tres equipos de maquinaria pesada, dos agentes del medio natural y siete técnicos de extinción.
En la zona está trabajando un retén de tierra, un helicóptero, dos aviones, una dotación del consorcio de bomberos de la Diputación Provincial de Badajoz, un retén aerotransportado y un agente del medio natural.