Y no hay cosa que más odio suscite entre las personas que la mentira desvelada, sobre todo cuando la misma afecta al dogma de los seguidores de corazón que son los que antes repulsan del ídolo al que han aclamado antes con vítores y rosas, ya que el resto (los infieles) no lo teníamos en consideración desde nunca (para nosotros es una demostración más de su mentira).