Un 47% de los extremeños cree que el trabajo no presencial será el más habitual en los próximos años
Una multinacional ha elaborado un estudio que se ha presentado bajo el título "Cómo será el mercado laboral dentro de 5 años".
La empresa ha hecho la investigación través de una encuesta a más de 2.000 personas de entre 18 y 65 años de edad, con el objetivo de conocer de boca de los españoles con edad de trabajar qué cambios creen que sufrirá el mercado laboral en nuestro país.
La conclusión más llamativa es que el presencialismo laboral cada vez tendrá menos peso. Según los datos de la encuesta, casi la mitad de los españoles piensa que ha cambiado la cultura empresarial y ya no se le da tanta importancia a la presencialidad sino a la productividad.
Así, el 54% de los encuestados considera que el trabajo híbrido será la forma más habitual de trabajar en los próximos años, 47% en el caso de los extremeños, y un 27% de los españoles asegura que lo será el trabajo en remoto, 33% en Extremadura. Por si eso fuera poco, casi la mitad de los trabajadores españoles (49%) afirma que la semana laboral de 4 días será una práctica totalmente generalizada dentro de un lustro, porcentaje que en Extremadura se sitúa en el 47%.
Por otro lado, más de la mitad de los españoles piensa que los trabajadores de nuestro país no están suficientemente preparados para los próximos cambios del mercado laboral. Son los jóvenes entre 18 y los 24 años quiénes más confían en su preparación, sin embargo, a mayor edad, más crece el escepticismo sobre su adecuación a las necesidades futuras.
Asimismo, 9 de cada 10 españoles afirman que en 2028 habrá puestos de trabajo que todavía no existen, un 96% en el caso de los extremeños, y el 76% asegura que eso hará que las oportunidades laborales sean mayores que en la actualidad, 73% en el caso de Extremadura.
Sin embargo, el nacimiento de nuevos puestos de trabajo hará que otros estén llamados a extinguirse en los próximos años, así lo consideran 3 de cada 4 españoles.
Según el 77% de los encuestados, profesiones basadas en tareas más rudimentarias y repetitivas serán sustituidas por inteligencia artificial, un 89% en el caso de los extremeños, y casi 7 de cada 10 creen que la tecnología puede resultar un factor excluyente para ciertos trabajadores, en el caso de Extremadura, el 71% de los encuestados está de acuerdo con la afirmación.
Por el contrario, en este contexto, 2 de cada 3 españoles confían en las empresas y en su capacidad de adaptación a la nueva realidad del mercado, aunque casi el 86% considera que las empresas tendrán dificultades para encontrar empleados cualificados en 2028.
Según el informe, la mitad de los españoles afirma que, dentro de 5 años, la elevada tasa de desempleo y la precarización del trabajo juvenil seguirán siendo las principales barreras de acceso al mercado laboral, que seguirá marcado por la incertidumbre económica y el cambio climático.
Preguntados por el sector que más empleo creará dentro de 5 años, los españoles no tienen dudas al respecto: el tecnológico es el más mencionado. A continuación, se sitúa el comercio y la logística, un sector que resultará clave para la aplicación de las competencias digitales según reconocen casi 2 de cada 3 encuestados.
El auge del uso la tecnología por parte de las empresas es innegable. Tal es así que, más de 4 de cada 10 españoles aseguran que éstas optarán por reducir su plantilla a favor de la tecnología mientras que el 39% considera que las compañías solo incorporarán trabajadores especializados.
En este sentido, 2 de cada 5 españoles consideran que los trabajadores más senior podrían perder su empleo por el avance acelerado de las TIC, al necesitar más tiempo que los jóvenes para adaptarse a los cambios. De hecho, para el 58% de los encuestados la soft skill que más se requerirá por parte de las empresas en los próximos años será la capacidad de adaptación al cambio, un 53% en el caso de los extremeños, y casi el 77% piensa que no adaptarse a las nuevas tecnologías podría ser causa de despido dentro de 5 años, porcentaje que se sitúa en el 76% en el caso de Extremadura.
Que la tecnología está cambiando el tipo de trabajo, las tareas y las habilidades que las empresas requieren de sus empleados es algo que nadie pone en duda ya. En quién recae la responsabilidad de mejorar esas habilidades es ya objeto de discusión. Casi 8 de cada 10 españoles piensan que las compañías deberán apostar por mejorar las habilidades de sus empleados para seguir siendo competitivas.
En este sentido, el 59% de los encuestados tiene claro que en 2028 la responsabilidad formativa dependerá de ambas partes: los empleados y la empresa, aunque un 33% sostiene que ese peso debe recaer exclusivamente en la empresa. No es de extrañar, por tanto, que más del 90% de los españoles crean que las empresas deben apostar por la formación continua y personalizada para que los empleados puedan adaptarse a estos cambios, así como establecer formas de trabajo más flexibles y colaborativas.