Un juzgado de Plasencia condena a Unicaja a devolver el dinero a una víctima de phishing

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Un juzgado de Plasencia condena a Unicaja a devolver el dinero a una víctima de phishing

Desde hace dos años, en la Unión de Consumidores de Extremadura se han recibido decenas de denuncias por casos de phishing, la técnica mediante la que un estafador se hace pasar por la entidad financiera para obtener los datos de banca online e intentar realizar compras o transferencias con nuestras tarjetas y cuentas.

“Afortunadamente, estos casos tienen solución. La semana pasada hemos obtenido una nueva sentencia favorable para uno de nuestros socios, que fue estafado con 3.010 euros por delincuentes que robaron sus datos de banca online en Unicaja, realizando de forma fraudulenta un total de 10 “bizum” de 99 euros y una transferencia de 2.000, además de dos comisiones de 10 euros cada una”, explica la unión de consumidores en nota de prensa.

En su sentencia, el juzgador de Plasencia determina que “hubo un fallo por el proveedor del servicio de pago, pues personas ajenas al banco, vulnerando sus sistemas de seguridad, pudieran hacerse pasar por el banco para enviar un SMS e incluso realizar una llamada fraudulenta al demandante, consiguiendo con ello acceder a su banca digital y llevar a cabo esas operaciones.”

“Recordamos que, en los cargos no reconocidos por los clientes, son las entidades financieras quienes tienen que demostrar que aquellos actuaron con negligencia o cometieron fraude. Ante el aumento de casos, recordamos a todos los ciudadanos que debemos ser precavidos ante los correos que aparentan ser entidades bancarias o servicios conocidos con mensajes del tipo: - Problemas de carácter técnico de la entidad; problemas de seguridad en la cuenta del usuario.

“Si recibes comunicaciones genéricas dirigidas a "Estimado cliente", "Notificación a usuario" o "Querido amigo", es un indicio que te debe poner en alerta. Sospecha si hay errores gramaticales en el texto. Si el mensaje te obliga a tomar una decisión en unas pocas horas, es mala señal. Contrasta directamente si la urgencia es real o no con el servicio a través de otros canales”, continua la asociación, “revisa que el texto del enlace coincide con la dirección a la que apunta. Un servicio con cierto prestigio utilizará sus propios dominios para las direcciones de email corporativas. Si recibes la comunicación desde un buzón de correo tipo @gmail.com o @hotmail.com, no es buena señal”, finaliza la nota de prensa.

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