El poder de los ciudadanos
En los últimos años estamos asistiendo a descubrimientos insólitos que hace poco ni siquiera vislumbrábamos, descubrimientos en el mundo de la astronomía, de la ciencia de la computación, de la IA, de la medicina, la biología.. Estamos en la revolución tecnológica-computacional. Se están aplicando tratamientos médicos eficientes, insospechados hace unos años ,que cronifican enfermedades hasta ahora mortales. El mundo está interrelacionado por Internet lo que hace instantáneas las comunicaciones interpersonales. Nunca como ahora el desarrollo científico- tecnológico había sido tan vertiginoso. Podríamos decir que viviésemos en un paraíso…
Sin embargo, las personas no aprovechamos estos avances por igual. El cambio climático, producido por la elevación de la temperatura de la Tierra está sometiendo a amplias regiones a devastaciones por inundaciones, sequías y otros fenómenos destructores con los consiguientes perjuicios para las poblaciones. EL neocolonialismo de los países más poderosos que expolian las riquezas en metales, como son el Cobalto, el Níquel, el Litio, y otros, metales necesarios para el desarrollo de la industria computacional y de la comunicación por móviles, cuyas minas están en países africanos, Congo, Costa de Marfil, etc.
Todo esto evidencia que vivimos en un mundo desigual y terriblemente injusto. Conflictos en países africanos y asiáticos, dictaduras, matanzas.. La invasión de Ucrania por parte de Rusia . Y ahora, la guerra entre Israel y Hamás (Palestina) que está ocasionando un genocidio, por parte de Israel, de la población palestina.
Ante la barbarie de las guerras de destrucción y muerte, me pregunto. ¿Qué están haciendo los dirigentes políticos de las democracias? ¿Y los dirigentes religiosos que se atribuyen el poder sobre las masas.? ¿No proclaman la paz las religiones? ¿Dónde está la enorme energía de las ONGs por el desarrollo?
¿Dónde está el poder de la cultura, de las artes plásticas y escénicas, de la música, de la literatura, de la filosofía, del cine..? ¿Dónde las personas expertas en mediación de conflictos políticos? ¿Y dónde nuestro poder como ciudadanos?