La transformación en autovía de los 18 kilómetros que separan el municipio cacereño de Moraleja de la localidad portuguesa de Termas de Monfortinho acumula más de una década de retraso.

Desde la inaguración, en el mes de marzo de 2015, del tramo comprendido entre Coria y Moraleja, el proyecto ha permanecido aparcado en los despachos a la espera de que el Gobierno de Portugal moviera ficha y anunciara que iba a dar continuidad al trazado, pues la Junta de Extremadura decidió finalizar la autovía en Moraleja hasta que el país vecino comunicase su intención real de sustituir la vía rápida que inicialmente anunció por una autoestrada, tal y como se denomina allí.

El 13 de octubre de 2022, la entonces consejera de Movilidad, Transporte y Vivienda de la Junta de Extremadura, Leire Iglesias, anunció que "próximamente y mediante contratación anticipada", el ejecutivo del socialista Guillermo Fernández Vara iba a publicar la licitación de los 18 kilómetros pendientes del lado español de la autovía EX-A1 para conectar Moraleja con la localidad lusa de Monfortinho. Actualmente, la vía que arranca en Navalmoral de la Mata finaliza sin continuidad en Moraleja, municipio que enlaza con Portugal a través de una carretera convencional.

Apenas dos meses después, la consejería de Movilidad, Transporte y Vivienda publicó el servicio de asistencia técnica para la actualización del proyecto por un importe de 637.664,87 euros y un plazo de ejecución de 10 meses, dividido en dos lotes. El primero es el correspondiente al tramo Coria/Moraleja - Portugal y el subtramo Moraleja Oeste-Cilleros por 330.741,16 euros; el segundo lote es el correspondiente al Coria/Moraleja - Portugal y el subtramo Cilleros-Portugal por 306.923,71 euros. El contrato con las empresas adjudicatarias no fue formalizado hasta el mes de septiembre de 2023 por lo que, de cumplirse los plazos, el estudio debería estar entregado a principios de este verano.

UN PROYECTO ATASCADO

Los socialistas extremeños siempre se mostraron reacios a desempolvar el proyecto por los continuos cambios de opinión de los vecinos de Portugal. En los momentos en los que Leire Iglesias hacía este anuncio, el ejecutivo portugués había licitado el proyecto de nuevo trazado de la carretera IC31 entre Castelo Branco y Monfortinho como una "vía de altas capacidades pero con dos carriles", y no como una autovía que enlazaría con la extremeña EX-A1.

Ahora las cosas han cambiado y la opinión del Gobierno de Portugal también. El proyecto se va a desarrollar en varias fases en territorio portugués y la primera se encuentra muy avanzada; incluso ha sido aprobado el preceptivo estudio de impacto ambiental entre Alcains -Castelo Branco- y Penha García. La segunda fase contempla un proyecto de autovía entre Penha García y Monfortinho, cuyo trazado se encuentra pendiente del estudio de impacto ambiental.

La mini-cumbre celebrada esta semana en Moraleja con la asistencia de autoridades de ambos lados de La Raya, así  como empresarios, representantes de grupos de acción local, agentes turísticos y miembros de otros colectivos, se ha fijado un calendario de acciones para tratar de impulsar la construcción de la autovía de Moraleja a Castelo Branco.

En territorio extremeño faltan por ejecutarse poco más de 18 kilómetros entre Moraleja y el límite con Portugal, a la altura del puente sobre el Río Erjas. En Portugal es necesario acometer un proyecto de 68,5 kilómetros para el desdoblamiento de la carretera IC31, que enlazaría con la EX-A1 en Termas de Monfortinho.

Los asistentes a esta reunión ibérica, que tendrá continuidad dentro de unas semanas en Castelo Branco, no quieren oir hablar de promesas, sino de un calendario con fechas concretas que muestre licitaciones, estudios de impacto ambiental y ejecución de las obras. Tras el paso al frente que ha dado el Gobierno de Portugal, la Junta de Extremadura tiene ante sí el reto de dar continuidad al proyecto en territorio cacereño.

La alianza territorial Movimiento Social Ciudadano Norte, que fue la que convocó la reunión de esta semana en Moraleja, ha ya reclamado al ejecutivo de María Guardiola que los presupuestos generales de la Junta de Extremadura para 2024, 2025 y 2026 contemplen una partida inicial de 50 millones de euros para avanzar en la construcción de la autovía.

En la imagen, de izquierda a derecha, João Carlos Sousa, vareador de la Camara Municipal de Idanha-a-Nova; Leopoldo Martíns, presidente de la Camara Municipal de Castelo Branco; César Herrero, alcalde de Moraleja, y Francisco Martín, portavoz del Movimiento Social Ciudadano Norte.