El Ayuntamiento de Mérida subraya que la violencia hacia las mujeres es un problema estructural
La erradicación de las violencias contra las mujeres es una tarea que corresponde a toda la sociedad como parte de un esfuerzo colectivo.
Una declaración institucional del Ayuntamiento de Mérida leída durante el pleno municipal subraya que la violencia que sufren las mujeres por el mero hecho de serlo supone un "problema estructural" que "atraviesa fronteras, culturas y circunstancias".
La declaración ha sido acordada por PSOE, PP, XMérida y Unidas por Mérida (y sin el apoyo de Vox) con motivo de la conmemoración el próximo 25 de noviembre del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
En el texto, según ha explicado el alcalde, Antonio Rodríguez Osuna, se reafirma el "compromiso" con la lucha por la igualdad y la dignidad.
"La erradicación de las violencias contra las mujeres es una tarea que nos corresponde a toda la sociedad como parte de un esfuerzo colectivo para transformar las estructuras que perpetúan el machismo y la desigualdad, evitando caer en los discursos negacionistas, porque a pesar de los desarrollos legislativos en España, aún queda mucho por hacer".
"A esta tragedia hay que sumar las innumerables violencias cotidianas que permanecen muchas veces invisibles y silenciadas: la violencia económica que priva a las mujeres de su independencia; la violencia vicaria, donde los hijos e hijas son utilizados como instrumentos de sufrimiento; la violencia digital, que se manifiesta en amenazas, acoso y chantaje en el entorno virtual; y la trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual, una de las formas más crueles de esclavitud contemporánea", añade el texto.
El alcalde ha incidido en que no se puede olvidar tampoco el uso de la sumisión química, una práctica "deplorable que convierte a las víctimas en objetos sin voluntad para ser violentadas impunemente".
En la declaración, se ha recordado especialmente a las mujeres y niñas de Afganistán, a quienes las nuevas leyes del régimen talibán han privado "aún más" de libertad, "recluyéndolas en sus hogares, sin acceso a la educación, al trabajo ni a la vida pública".