El PSOE de Extremadura ha advertido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que no permitirá chantajes por parte de ninguna otra comunidad autónoma en el proceso de negociación del nuevo modelo de financiación autonómica.

De este modo, los socialistas extremeños se alinean con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, y con el PP, contrarios a la aprobación de un modelo que establezca privilegios para Cataluña como están reclamando las fuerzas independentistas.

Page ha cargado duramente contra las propuestas que contempla el Gobierno de Sánchez en materia de financiación autonómica para satisfacer las reclamaciones del independentismo, dotando a Cataluña de un tratamiento singular, y ha considerado que se está pagando un precio demasiado caro por mantener un puesto.

En el mismo sentido, la presidenta de Extremadura, María Guardiola, ha considerado una "total injusticia" el tratamiento especial que intenta aprobar el Gobierno para Cataluña en materia de financiación autonómica y ha lamentado que Pedro Sánchez permanezca en el poder gracias a tratos de favor a determinados territorios que necesitan menos que otras regiones como Extremadura.

La polémica sobre la financiación de las comunidades autónomas se ha desempolvado de nuevo después de que la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, declarase en RNE que algunas regiones como Cataluña tienen que tener un tratamiento especial, pese a que se mantiene la intención de negociar junto al resto de comunidades autónomas para impulsar un modelo que sea válido para todas.

Ahora el PSOE de Extremadura advierte que "los hechos o cuestiones singulares no pueden bajo ningún concepto suponer diferencias entre españoles" y recuerda que el 22 de mayo se constituyó una Comisión No Permanente de Estudio sobre Financiación Autonómica impulsada por los socialistas en el seno de la Asamblea de Extremadura.

"La negociación nunca podrá servir para enfrentar territorios" ha indicado el PSOE regional, que ha dejado claro que el modelo al que aspiran los socialistas es aquel que permita mantener los servicios públicos de calidad, basado en la igualdad, la justicia social y la solidaridad. 

"Lo que no puede permitir el PSOE de Extremadura es que la negociación de la financiación autonómica se utilice como moneda de cambio en las negociaciones que se emprendan en los territorios" han advertido los socialistas de la región, contrarios a que se reediten "experiencias ya superadas como el pacto fiscal que propuso la Generalitat de Cataluña acordó cuando gobernada Mariano Rajoy".

Desde la llegada de Miguel Ángel Gallardo a la secretaría general del partido, el pasado 2 de marzo, es la primera ocasión en la que el PSOE regional planta cara con dureza al Gobierno de Pedro Sánchez en un asunto que ha liderado desde el principio el presidente castellano-manchego.