Un falso aviso de bomba de madrugada en Cetarsa Navalmoral obliga a desplazar a los Gedex
Un comunicante anónimo llamó al 112 de Extremadura de madrugada informando que había instalado un artefacto explosivo en el interior de la fábrica de Cetarsa en Navalmoral de la Mata.
La Guardia Civil se ha visto obligada a desplazar a Navalmoral de la Mata al Grupo de Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos y de Naturaleza NRBQ (Gedex) tras recibir la pasada madrugada un aviso de bomba que ha resultado ser falso.
El operativo comenzó en torno a las 05:45 de la madrugada de este jueves. A esa hora, el Centro de Atención de Urgencias y Emergencias 112 de Extremadura recibió una llamada de una persona no identificada que comunicó que había instalado una bomba en las instalaciones de la Compañía Española de Tabaco en Rama, S.A. (Cetarsa), en Navalmoral de la Mata.
El 112 puso los hechos en conocimiento de la Guardia Civil y la Central 062 movilizó a dos patrullas de servicio de la zona y a los Gedex, que inspeccionaron las instalaciones para verificar los hechos.
El dispositivo desplegado por los agentes ha obligado a realizar cortes de tráfico durante varias horas en la rotonda más próxima a la fabrica como medida de seguridad.
Finalmente, pasadas las 10:30 de la mañana, la Comandancia de la Guardia Civil de Cáceres ha confirmado que se ha tratado de un falso aviso de bomba.
AVISO DE LA GUARDIA CIVIL
La Guardia Civil ha advertido que realizar un aviso falso de bomba que provoque la movilización de los servicios de emergencia constituye un delito según el artículo 561 del Código Penal. En este sentido ha afirmado que quien simule o afirme falsamente una situación de peligro para la comunidad o un siniestro que requiera asistencia, y como resultado movilice a los servicios de policía, asistencia o salvamento, puede ser castigado con penas de prisión de tres meses y un día a un año, o una multa de tres a 18 meses.
Además, el responsable podría ser obligado a cubrir los costos derivados de la movilización de recursos públicos y compensar los perjuicios causados a las personas o entidades afectadas. Además, en el caso de menores, sus tutores legales pueden asumir las responsabilidades económicas.