La Confederación de Empresarios llama a hacer un frente común que detenga el cierre de Almaraz

La Confederación de Empresarios llama a hacer un frente común que detenga el cierre de Almaraz

La patronal rechaza el ‘apagón nuclear’ y pide un frente común para proteger esta industria estratégica que “fija población, genera empleo de calidad y aporta un valor incalculable al desarrollo económico de la región”.

La Confederación Independiente de Empresarios y Autónomos, CIEM, traslada su “firme apoyo” a la manifestación convocada para este sábado 18 de enero en contra del cierre de la central nuclear de Almaraz. Esta movilización, que refleja el sentir de miles de ciudadanos y del tejido empresarial, busca frenar lo que para CIEM supone un “error histórico” que tendrá graves consecuencias para el empleo, el desarrollo industrial y la prosperidad de Extremadura.

CIEM hace un llamamiento a las administraciones, empresas y sociedad civil para formar un frente común que detenga el cierre de Almaraz. “Es necesario proteger esta industria estratégica que fija población, genera empleo de calidad y aporta un valor incalculable al desarrollo económico de la región”, señala el presidente de CIEM, José Luis Iniesta.

La central nuclear de Almaraz representa una fuente de empleo industrial de calidad que es esencial en la región. Con 700empleos directos, de los cuales el 50% son ocupados por titulados superiores, y un impacto directo estimado en el PIB extremeño de 115 millones de euros, “su cierre dejaría un vacío sin precedentes en esta comarca, pero también en la economía de la región”, recalca la patronal.

La confederación recuerda el impacto positivo que esta instalación tiene en el tejido empresarial local, a través de los empleos indirectos que genera mediante contratos con empresas auxiliares.

CIEM advierte por eso que su desmantelamiento “afectará profundamente al empleo y la demografía de estas zonas, poniendo en riesgo su estabilidad económica y social”.

Los municipios del área de influencia de la central, como Almaraz y Romangordo, son las localidades con la renta per cápita más alta de Extremadura, en gran medida gracias a la actividad económica derivada de la planta.

La Confederación advierte que “las inversiones requieren certezas, y la incertidumbre que genera el cierre de Almaraz puede dar al traste con proyectos industriales capaces de transformar Extremadura”.

Recuerda en este sentido, que Extremadura trabaja desde hace tiempo para consolidarse como un polo industrial electrointensivo, con proyectos industriales en marcha como la gigafactoria o la fábrica de diamantes, y nuevas inversiones como los centros de datos de Navalmoral y Valdecaballeros, que podrían verse afectados.

La manifestación de este sábado representa una oportunidad para expresar la importancia de Almaraz no solo como motor económico de Extremadura, sino como símbolo del compromiso con el empleo, la industria y el bienestar de sus ciudadanos