Abel Bautista a los afectados de Jarandilla: "Si la Junta fuera responsable resarciremos los daños"
La Junta de Extremadura necesita esclarecer las causas del suceso, dirimir de quién es la responsabilidad, así como la evaluación de los daños provocados y los informes de los seguros privados.
Si la Junta de Extremadura es la responsable del colapso de la presa de La Maricana de Jarandilla de la Vera, resarcirá con celeridad los daños provocados a las familias afectadas.
Ese ha sido el compromiso adquirido este martes por el consejero de Presidencia, Interior y Diálogo Social de la Junta de Extremadura, Abel Bautista, que se ha comprometido a actuar con rapidez para tratar de normalizar la situación lo antes posible.
Bautista ha trasladado la empatía del ejecutivo de María Guardiola a las familias afectadas por la rotura de la balsa y ha asegurado que la Junta de Extremadura "estará a la altura, como no podía ser de otra manera, y a su lado".
En este sentido ha dicho que necesitan esclarecer las causas del suceso, dirimir de quién es la responsabilidad, evaluar los daños provocados y disponer de los informes de los seguros privados.
"Si la Junta de Extremadura fuera responsable, que a nadie le quepa duda que procederemos con la celeridad suficiente para resarcir los daños, todos, que se hayan derivado de la misma, a través los cauces legales más rápidos que existan", ha dicho el consejero extremeño de Interior.
En cualquier caso, Bautista ha recordado que el Gobierno regional está en disposición de trabajar de manera coordinada con el resto de administraciones públicas, para que, con independencia de quien sea la responsabilidad y a quien le corresponda indemnizar, trabajen conjuntamente para que las familias afectadas reciban cuanto antes lo que le corresponde.
CARRETERA EX-119
Con respecto al estado en el que se encuentra la carretera EX-119, se ha encargado un informe de daños y soluciones de reparación a la empresa concesionaria del mantenimiento de la vía. El siguiente paso es realizar una inspección con geo-radar y tomografía eléctrica que no se podrá llevar a cabo hasta que no esté completamente seco el firme, ya que mide densidades y en el estado actual daría resultados erróneos.
La carretera mantiene cerrado al tráfico un carril y se ha adoptado un sistema de semáforos para regular la circulación con la presencia de personal desde la mañana de este lunes.
La avalancha de agua que discurrió ladera abajo desde la charca no sólo cruzó la carretera por arriba, sino que la atravesó por debajo siguiendo el curso de una tubería subterránea que cruza la vía hasta dar continuidad al arroyo en la parte baja de Jarandilla de la Vera.
Para determinar las actuaciones que se llevarán a cabo y el riesgo de colapso de la carretera por la existencia de zonas descomprimidas habrá que esperar el resultado de los informes, aunque se mantendrá la inspección sobre el terreno de manera periódica.