Este es el calvario que ha vivido una mujer de Coria tras ser atropellada este verano
Dicen que en cuestión de instantes te puede cambiar la vida. Y esto fue lo que le paso a Encarna Lumbreras Gómez, una vecina de Coria que el 16 de agosto vio como le cambió la vida.
Encarna fue atropellada por un vehículo en Coria cuando iba a visitar a su madre a la residencia de mayores. Afortunadamente, podía haber sido peor, pero lo cierto es que el calvario al que se ha visto sometida y del que aún sigue pagando las consecuencias ha sido y es una verdadera pesadilla para ella y para su familia.
El atropello le provocó fractura de radio, otra en la órbita, rotura y lesiones en las dos rodillas y un derrame cerebral. Desde que llegó al Hospital Ciudad de Coria le clarificaron que debía someterse a una operación para reparar el daño recibido en las rodillas.
Desde ese momento y, tras casi un mes de espera, Encarna ha pasado cada día reclamando su operación y preguntándose cuánto tiempo más tenía que pasar para ser intervenida.
Según ha relatado la familia a LA MAÑANA DE RADIO INTERIOR, el equipo médico de Coria pidió que la operación se realizase en un centro hospitalario con UCI, como puede ser el Universitario de Cáceres, ya que el hospital cauriense no dispone aún de este servicio.
Mientras, en el Hospital de Cáceres y en el Universitario de Badajoz, defendían que se la operara en Coria a pesar de las limitaciones de este hospital rural situado en el norte de Cáceres.
A pesar de la insistencia de la familia en buscar una solución para Encarna, la esperada operación no llegó hasta el 14 de septiembre. Su hijo asegura que no han recibido una respuesta formal por parte del SES a tal demora y desean que nadie tenga que pasar por el calvario al que este verano se ha visto sometida Encarna tras el atropello.
Pero la gota que colmó el vaso ocurrió el 11 de septiembre. Ella fue trasladada en ambulancia desde el Hospital de Coria al Universitario de Cáceres. Cuando llegó asegura que se sintió abandonada en el área de Urgencias ya que nadie sabía qué hacía allí y de qué operación se trataba, tal y como ha relatado indignada su familia. "Le llegaron a preguntar si la tenían que operar de la cadera", añadió su hijo en declaraciones a este medio de comunicación.
Ahora, Encarna ya está en casa intentado superar las secuelas físicas que le dejó el atropello. Pero el duro camino que tiene que recorrer esta mujer cauriense sigue lleno de baches. A pesar de que ya está en casa, ella no ha vuelto a ser la misma y necesita del apoyo y comprensión de los suyos para superar este mal trago que le ha constado estar encerrada prácticamente durante un mes en una habitación del Hospital de Coria, esperando sólo una operación.
La familia pide respuestas al SES y desean que esta terrible historia no la tenga que vivir nadie más. "Qué está pasando aquí , es que ningún hospital en Extremadura con UCI va a operar a mi hermana? Han pasado 15 días desde el atropello. Ahora ha sido a ella mañana te puede pasar a ti . Mi hermana ya ha estado en Cáceres y allí no han querido operarla y ahora otra vez está en Coria y tampoco la van a operar ahí. Hay derecho a que la traten así? Es que nadie puede hacer nada ?", decía indignada su hermana en redes sociales.
Lo cierto, es que los daños no sólo afectan a Encarna, su hijo no podrá irse a Cáceres a seguir su formación porque ha decidido que su madre la necesita y ahora ha de cuidar de ella y defender sus derechos como paciente de un sistema sanitario en el que detrás de cada número hay un historia, a veces dura como ésta.