Se han detectado desviaciones positivas en 2022 que fueron camufladas utilizando los fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, por lo que el déficit presupuestario de ese año fue de casi 334 millones, y no de 168 millones, como figuraba en la documentación que el Gobierno de Vara puso en manos del Tribunal de Cuentas.
Con los PGEx 2025 "habría continuado con el crecimiento de la región, con esa apuesta por esos servicios de calidad, proyectando un montón de actuaciones" que, según ha dicho, la Junta va a seguir acometiendo.
Siendo consciente de que no dispone de mayoría suficiente para aprobar las cuentas regionales, ha hecho un llamamiento al resto de fuerzas políticas de la oposición y ha manifestado que Extremadura necesita de todos los representantes públicos para formar parte de la solución y no de los problemas.
Pero lo cierto es que tras su rechazo tajante a la posibilidad de llegar a un acuerdo con los socialistas, los populares deberán hacer malabarismos para sacar hacia delante las cuentas regionales.