Después de dos semanas de intensas negociaciones, cruces de llamadas telefónicas y reuniones, el partido ha logrado reconducir la situación, despejar el camino a Sánchez Cotrina y promover una única candidatura de integración en la que "no se excluirá a nadie".
A medida que han ido transcurriendo los días ha ido creciendo la incertidumbre sobre la posibilidad de que Ismael Bravo optase a la secretaría general de los socialistas cacereños al tiempo que aumentaba la posibilidad de consensuar una candidatura única.
El PSOE de Cáceres afronta a partir de ahora un proceso de renovación que ya tiene nombres propios para suceder al actual líder: Álvaro Sánchez Cotrina e Ismael Bravo Díaz.
Los socialistas tendrán que elegir entre dos candidaturas, una considerada oficialista y continuista, apoyada por el aparato del partido en Cáceres, y otra opositora que cuenta con el respaldo del líder regional del PSOE, Miguel Ángel Gallardo.