Según APAG, la grave crisis que atraviesa el sector agrícola, marcada por la sequía, la guerra de Ucrania y el encarecimiento de los insumos, exige medidas urgentes para garantizar la viabilidad de las explotaciones.

Según la organización agraria, esta situación se debe a una "negligencia" por parte de los gobiernos del PP y del PSOE, quienes no habrían gestionado de manera adecuada los presupuestos destinados a estas ayudas.

Además de la escasez, otros factores como la subida del precio del vino blanco convencional y el aumento del rendimiento de prensado respaldan la demanda de precios más altos por parte de los viticultores.

Denuncian la falta de vigilancia nocturna en las zonas de cultivo, contraponiendo esta situación con los controles que sí se realizan a los agricultores por parte de la Guardia Civil y el Seprona.

Las labores de control de ungulados en Monfragüe incluirán el mantenimiento de infraestructuras como cercas, el sacrificio de ejemplares enfermos, la toma de muestras y la gestión de cadáveres.

Para garantizar la seguridad en las carreteras, la Delegación del Gobierno ha anunciado que se intensificarán los controles durante la campaña.

Con esta reunión, lo que se busca es la coordinación para mejorar la prevención de robos y la aplicación de buenas prácticas en el campo.

UPA-UCE Extremadura estima que se puede haber perdido hasta el 80% de la cosecha, lo que sitúa a los productores en una "situación muy grave".

A uno de ellos, también se les instruyó diligencias por delito de atentado a agentes de la autoridad, al intentar envestirlos durante su huida.

El decreto-ley incluye también un régimen de ayudas a las Agrupaciones Técnicas de Sanidad Vegetal (ATESVE), por un importe de 1.550.000 euros. Las subvenciones consistirán en el abono de una cantidad proporcional en función de los contratos de trabajo de los asesores empleados por estas agrupaciones.

Extremadura impulsará ante los ministerios de Agricultura y de Transición Ecológica la modificación de la normativa estatal que prohíbe la quema de rastrojos